El otro día me
enviaron un vídeo que me encantó. Un padre de familia se levantaba y todo
a su alrededor estaba envuelto con papel de regalo, él mismo, su mujer, sus
zapatos, su desayuno, la alcachofa de la ducha, sus hijos, su perro, sus
zapatos, su coche… Me pareció genial y me hizo pensar en la suerte tan enorme
que tengo.
Porque cada día
es un regalo y todo lo que nos rodea son regalos de la vida. No quiero parecer
cursi, ni noña, solo quiere ser realista y sobre todo, agradecida.
Agradecida por despertar
cada mañana. Por haber nacido en esta parte del mundo. Por cada
abrazo y beso de mis hijos. Por cada risa compartida. Por la capacidad de
querer y de ser querida. Por cada cosa cotidiana que doy por hecha pero que un
día me podría faltar como les falta a muchos. Por el cariño que siento por
tanta gente y por el que sé que tanta gente siente por mí. Por unos fantásticos padres que
espero sigan mucho tiempo con nosotros pero que un día no estarán. Por
unas hermanas únicas. Por una familia maravillosa. Por una casa
acogedora. Por un marido siempre pendiente de todo. Por unos amigos
geniales. Por unos compañeros de trabajo con los que tan bien me lo paso. Por
tanta gente anónima a mi alrededor que me hace la vida más fácil y a la que no
me paro nunca a dar las gracias. Por un trabajo en el que disfruto. Por
tantas personas indispensables e incondicionales que forman parte de mi vida.
Por tener salud, por poder andar, por poder ver y poder oír. Por tener ejemplos cercanos y muy grandes que seguir.
Porque todo esto lo tengo yo y muchos no lo tienen, ni lo han tenido jamás. Porque otros lo tenían y muy a su pesar, lo perdieron. Y porque muchos lo tienen y no lo valoran.
Porque todo esto lo tengo yo y muchos no lo tienen, ni lo han tenido jamás. Porque otros lo tenían y muy a su pesar, lo perdieron. Y porque muchos lo tienen y no lo valoran.
No necesito que
me toque la lotería ni que nadie me regale nada. El regalo que pediría esta
Navidad es muy difícil de conseguir y soy consciente. Pero confío en el Dios
niño que está a punto de nacer y sólo a Él se lo pido.
¡¡FELIZ NAVIDAD!!