miércoles, 9 de febrero de 2022

Del metaverso y sus avatares

Me intriga mucho el metaverso, esa realidad virtual que poco a poco va agrandando sus dominios.

A algunos les suena a ciencia ficción pero el metaverso ya está aquí, aunque aún no he tenido el gusto de visitarlo.

Metaverso, así por resumir, es una especie de cuarta dimensión en la que cada uno de nosotros puede crearse un avatar y vivir una vida paralela, o perpendicular, depende cómo se mire. 

Suena tentador eso de crearse otro yo. Imagino que cada uno será libre de crearse el avatar como mejor le parezca. Mas alta, más guapa, más flaca, más joven, con los ojos más azules, o con el culo de la kardasian, que para gustos los colores. 

Me gustaría saber si la gente tenderá a crearse avatares que realmente les representen o si más bien dará rienda a su imaginación y aprovechará para crear avatares con los rasgos que siempre quisieron tener y nunca tuvieron. Me parece más apetecible lo segundo, ya que nos ponemos a inventar.  También me pregunto si esos avatares podrán mutar o si una vez creados son para siempre. ¿Puede un avatar cambiar de cara o de cuerpo? No tengo ni idea de lo que puede hacer o no hacer un avatar.  ¿Sienten y padecen  los avatares? ¿comen?, ¿se pueden  enamorar?, ¿casar? ¿divorciar?, ¿tener hijos?, ¿trabajan los avatares?. Si se trata de replicar la vida real en un entorno virtual no acabo de verle la gracia. En mi caso, si tengo que construir una vida paralela casi opto por tener poderes, volar, ser mágica, o hasta poner huevos de oro.

Si ya es complicado manejar una sola vida no quiero ni imaginar lo que debe ser gestionar dos. Qué estrés. Además, llegará un momento que no sabrás si andas fuera o dentro del metaverso. Como cuando no sabes si algo ha pasado de verdad o lo has soñado. 

Supongo que la idea es que poco a poco te vayas decantando por uno de tus dos yos. Debe ser muy frustante ser un avatar arrollador y exitoso en el metaverso y un personaje gris y aburrido en el mundo real. Habrá muchos  que sólo quieran ser ya avatares y vivir sólo un realidad virtual. Pero.. ¿qué harán entonces con su cuerpo? ¿habrá familias híbridas de padres "corpóreos" e hijos virtuales? 

 Imagino salas enormes con  cuerpos conectados a máquinas que los mantienen vivos tan sólo para que sus avatares sigan viviendo en su mundo. La definitiva escisión entre cuerpo y mente. Y por cierto, ¿dónde se queda el alma?  Un lío. Cuanto más lo pienso, más preguntas me planteo. ¿sobrevivirán los avatares una vez muertos sus creadores?  ¿Alguien los heredará? 

Me pega que esto del metaverso es un mundo infinito por explorar.  Algo así como el espacio subterráneo en el que aterriza  Alicia ( la del país de las maravillas) cuando cae por la madriguera. Un espacio muy parecido al real pero a la vez totalmente distinto. 

¿Es esto lo que nos depara el futuro? Prefiero no acertar. Suficiente guerra nos da ser de verdad uno mismo como para tratar de compaginar con cierta dignidad el "dos en uno".

Feliz semana!