Después de mi último post, no puedo dejar de dedicar una líneas a otro tema que también me
tiene muy sorprendida: la obsesión de cada vez más gente por comer "extremadamente" sano.
Me explico. Soy
máxima defensora de la comida sana. Por supuesto. Mis padres son médicos y
siempre nos han inculcado buenos hábitos alimenticios. Cuando era pequeña
en mi casa nunca había bollos, ni galletas industriales, ni coca cola. Por no
haber no había ni pan de molde ( sólo tomábamos el “pan pan” como lo llamábamos
en mi casa, como si el decirlo dos veces lo convirtiese en más pan que el
mero “pan”). Una comida equilibrada me parece fantástica. Fruta,
verdura, carne, proteínas, hidratos de carbono…
Hasta aquí todo
perfecto. Pero es que hay mucha gente que de tanto pretender comer sano, hace
cosas verdaderamente raras. Hay gente que toma la fruta antes de comer, por
ejemplo. Sinceramente, no veo muy normal tomarte una manzana antes de las
lentejas. Imagino que lo harán en su casa, porque ir a una comida de trabajo y
pedir que te traigan el kiwi antes de los aperitivos no creo yo que quede muy
normal.
Otros sólo toman
productos que sean ecológicos o biológicos. Cualquier comportamiento que
implique ser responsable con la conservación del medio ambiente y en general del
planeta me parece fantástica y algo a fomentar, está claro, pero cuidado
con los falsos mitos y las obsesiones. Todo en su justa medida, como cada cosa
en la vida.
El otro día
alguien me dijo que no probaba nada que pudiese “fermentar” en su estómago. Me
quedé loca. Jamás lo había pensado. ¿Qué cosas fermentan en tu estómago? Ni
idea. Otra amiga me dijo que no tomaba verduras que tuvieran almidón.
¿Perdón???. No tengo ni idea lo que lleva almidón, más allá del arroz. Pues
parece ser que las zanahorias, las alcachofas y los guisantes, por ejemplo,
tienen almidón, mientras que los espárragos, las judías verdes o la coliflor no
tienen. No lo sabía la verdad.
Algunos se han
enganchado a lo “détox” y ya no comen otra cosa. Por cierto, eso de
desayunar un zumo de espinacas… no sé cómo calificarlo. Lo siento, pero donde
esté un buen café con churros y porras que se quite lo demás. Puede que no sea
tan sano, seguro, pero está delicioso y al final.. ¿de qué se trata? De
disfrutar, o no? Parece que algunos lo están olvidando.
Y para acabar, el
otro día leí, que hasta existe un trastorno denominado ortorexia, que consiste
en la obsesión patológica por comer alimentos sanos. En fin, que me
parece estupendo comer equilibrado y sano pero cuidado con obsesionarse.
Feliz semana!
jajajajaja, verdaderamente eres GENIAL. Ortorexia....., lo que aprendemos contigo. Verdaderamente hay que cuidarse pero no obsesionarse!! Besitos
ResponderEliminarBesos Rome!
EliminarTotalmente de acuerdo mary, y como es eso de no beber agua mientras comes!!!!! Perdona???? Y como haces si tienes sed!! Nada ; a ahogarse!!! Y esos que de repente dices que has cenado spaghetis y la X ara que te ponen es de como si hubieras matado a tu madre. Una locuraaa
ResponderEliminarja, ja, lo dicho, hay que cuidarse pero no obsesionarse!
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