sábado, 22 de octubre de 2016

El hombre biónico


Por el título parecería que voy a hablar de algún superhéroe o algo así, pero, no. Hoy quiero hablar de alguien cuya historia me ha impresionado. Me refiero a Hugh Herr, recién galardonado con el Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica.

Su historia es impresionante. Con sólo  17 años, escalando, tuvo la mala suerte de ser sorprendido por un terrible temporal de nieve que le mantuvo tres noches perdido a 30 grados bajo cero. Cuando le rescataron estaba prácticamente congelado y aunque logró sobrevivir, tuvieron que amputarle las dos piernas por debajo de las rodillas.

Después de varios meses de cirugías y un durísimo proceso de rehabilitación, Herr, para asombro de todos, decidió que quería seguir escalando y para lograrlo, empezó a utilizar unas prótesis diseñadas por él mismo. Sorprendentemente, como resultado de su habilidad en el diseño de sus propias prótesis, Herr logró escalar a una altura todavía mayor de la que había alcanzado antes del accidente. Verdaderamente espectacular.

En paralelo, Herr se graduó en física en la Universidad de Millersville, hizo una maestría en ingeniería mecánica por el MIT ( Massachussets Institute of Technology) y un doctorado en biofísica en la Universidad de Harvard.

Hoy en día, Herr dirige el grupo de biomecatrónica en el MIT que son es el que crea estas revolucionarias piernas biónicas por las cuales ha logrado el esperado Premio Princesa de Asturias.

Las  piernas, rodillas y tobillos que desarrolla Herr y su equipo están conectados a los nervios a través de sensores. Estos sensores transmiten las órdenes del movimiento exacto que el cerebro quiere realizar con la pierna ausente.

Estas prótesis son tan “inteligentes” que no sólo te permiten mantenerte en pie o andar, sino que con ellas puedes correr, bailar y hasta escalar .


Durante la entrega de los premios, Herr dijo que su única meta es contribuir con todas sus fuerzas al gran reto global de acabar con la discapacidad a lo largo de este siglo. Un reto grandioso.

Como dijo el Rey en su discurso trayectorias como la Herr “hacen surgir en todos nosotros un sentimiento profundo de esperanza. La esperanza de que millones de personas con discapacidad en el mundo puedan mejorar su movilidad, su calidad de vida, y puedan incluso hacer cosas que antes apenas podían imaginar con ayuda de las prótesis y los exoesqueletos que él y sus colaboradores diseñan.” 

Me ha asombrado enormemente la valentía, el esfuerzo y tesón, la creatividad y la capacidad de innovación de este gran biofísico que ha logrado algo que hasta hace muy poco parecía de ciencia ficción.

Y me encantó además que acudiera a recoger los premios con un traje perfecto pero con un “toque” distinto: los pantalones cortados por debajo de la rodilla, mostrando sus prótesis.  

Está claro que para contribuir a ese gran reto de lograr un mundo sin discapacidad hace falta mucha inversión y muchos recursos que permitan seguir investigando, pero, además, es importante romper muchas barreras, prejuicios  y  tabúes y empezar a ver a las personas con discapacidad con mucha más naturalidad y a ello sí que podemos contribuir todos. No lo olvidemos.

Por cierto, decía al principio que no iba a hablaros de super héroes, pero mejor rectifico, no creéis? 


Feliz semana!!

2 comentarios:

  1. GRACIAS Herr!!!!!! Es la palabra que me sale nada más terminar de leer, otro de tus maravillosos post querida amiga. Y termino con la palabra ESPERANZA!!!!!

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