Por fin llegó el 31 de enero. Me pregunto cómo es posible que un mes se haga tan largo, teniendo en cuenta, además, que lo empezamos una semana más tarde. Porque la primera semana de enero es, en realidad, una semana de impasse, un compás de espera. Hasta el 7 de enero uno no entra en faena. Seguimos de resaca, de festejos, de cabalgata de Reyes, de roscones, de regalos, de emoción. Pero a partir del 7 llega la realidad y qué cuesta arriba se hace. Con razón se habla de la cuesta de enero. Una cuesta tan pronunciada que a veces se hace difícil subirla.
Dicen los expertos que es una cuestión de dopamina. En diciembre, con tanto jolgorio, la dopamina se dispara y nos provoca un estado de subidón. En enero, sin embargo, la alegría se frena, desciende la dopamina y nos entra en bajón. Algo así debe pasar.
Enero es el mes en el que uno pone a prueba su fuerza de voluntad. Toca dejar de comer, retomar el ejercicio, poner en marcha los nuevos propósitos. Es el mes en el que se asume que vuelves con las pilas cargadas, cuando lo cierto es que vuelves con las pilas más fundidas que nunca, y ello provoca cierto desasosiego.
En enero te enfrentas a la página en blanco del nuevo año, sin acabar todavía de dejar atrás el peso del anterior.
Es un mes de nuevas ilusiones, de expectativas, de replanteamientos, de propósitos, pero también de incertidumbre y de vértigo. El reloj se pone a cero. Nuevos logros por cumplir, nuevos objetivos, nuevas metas.
En enero toca enfrentarse a la báscula, toca hacer devoluciones, toca hacer nuevas listas, toca planear, toca coger carrerilla. Es demasiado pedir a un mes que tan sólo es el primero del año, un mes que tímidamente dan la bienvenida a un nuevo año.
En enero el tiempo pasa despacio, las horas se hacen interminables y las semanas se alargan indolentes. La pereza busca acomodo pero no hay sitio para ella y se revuelve molesta. Las rutinas, impacientes, tratan de imponerse de nuevo pero no logran aún consolidarse.
La buena noticia es que enero se ha acabado. Bendito 31 de enero.
Veremos qué nos depara el bueno de febrero. Ya vamos estando más entrenados...
¡Feliz semana!
Celebremos hoy, con una buena cena, el final de enero y que seguimos sin cumplir el propósito de estar a régimen.
ResponderEliminarComo siempre, eres absolutamente genial en tus reflexiones.
Mil gracias!! Hoy toca celebrar!!
EliminarCelebremos los nuevos propositos, nuevas ilusiones , nuevos errores, celebremos que tenemos todo un año por delante para llenar paginas en blanco. Aprovechemoslo!! Gracias por tus pequeñas historias. Marta
ResponderEliminarMuchas gracias Marta!! A celebrar!!
EliminarQue razón llevas María!!! que bien descrito está el mes de enero!!! largo, largo!!!🥰🥰🥰
ResponderEliminarEterno
EliminarJajjajaa perfectamente retratado
ResponderEliminarJeje. Gracias!!
EliminarLo mejor es tomarse unas minis vacaciones para recuperarnos de ese duro Enero jaja!!
ResponderEliminarYa toca jeje
EliminarUfff como ha costado Dios😱
ResponderEliminarMucho
EliminarEres una crack María…cuanta razón tienes… se me ha hecho eterno
ResponderEliminarEterno!
EliminarMe ha encantado!! Xa mi tb es el mes más triste del año!!
ResponderEliminarDuro!
EliminarLa cuesta de enero ya dura hasta el 31 de diciembre!!
ResponderEliminarJaja..muy agudo!
EliminarMe gusta mucho María! porque aunque es como lo describes, siempre dejas la puerta abierta a la ilusión. Es propio de tí por ese carácter tuyo alegre y divertido. María Elena
ResponderEliminarMil gracias querida amigaA
EliminarHola María, pues tienes razón, en enero nos falta algo de la dopamina del mes anterior… y además hay mucha gripe, virus, resfriados jejeje pero bueno, siempre hay motivos para algunas alegrías, guapa!
ResponderEliminarAsí es! Siempre hay motivo para la alegría, en cualquier mes!!!
EliminarFantástica reflexión, María!!!
ResponderEliminarComo siempre me haces cuestionarme las cosas!!
Me encanta!
Ya estoy esperando el siguiente, mil besos
Mil gracias!! Besos
EliminarEfectivamente, muyyyyyyy largo. Vamos a por Febrero. Animo!
ResponderEliminarFebrero me encanta!!!
EliminarJe je, para compensar, febrero es el más cortito, y el que menos lunes tiene 😉
ResponderEliminarSi!! Me encanta! Encima es mi cumple!
EliminarQue gran verda María 😩 Que pesadobynlago se hace enero!! 😘👍
ResponderEliminarPero ya estamos en febrero!!!
EliminarBuenísimo! Maria. A ver si febrero va mejor.
ResponderEliminarSeguro q si !! Gracias!!
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