Faltan muy pocos días para que acabe un año que nunca olvidaremos. Un año en el que el mundo se paró, dejó de dar vueltas y nos enclaustró a todos en casa. Un año en que han pasado muchas cosas y la mayoría malas, aún mirado desde la más optimista de las perspectivas. Pero al fin y al cabo, un año más en nuestras vidas y un motivo por tanto para estar agradecidos.
Ahí va mi abecedario de 2020, este año más especial que nunca.
A de Alegría. La alegría de que se acabe por fin un año que trastocó el rumbo del planeta. A también de Aplausos, los que hemos dado a tantas personas que se los han merecido.
B de Besos, los que hace meses que no podemos dar y que se acumulan para volar libres algún día.
C de Coronavirus, de COVID 19, ese bicho inesperado que no supimos ver venir, indiscreto, porque se mete donde nadie le llama, atrevido, porque es capaz de atacar a quien se cruce por su camino, traicionero, porque no sabes calcular su fuerza. C de Cuarentena y de Confinamiento, ese aislamiento que nos ha impuesto el maldito bicho, que nos ha alejado de nuestros seres queridos, que ha alterado nuestras costumbres y ha trastocado nuestros ritmos. 2020 ha sido sin duda el año de la C.
D de Datos, los que nos han tenido en vilo, los que reflejan una realidad que te pone los pelos de punta, los que no siempre nos parecen fiables. D también de Desigualdad, la que lamentablemente cada vez se hace mayor.
E de Esperanza, porque todos esperamos que 2021 lo cambie todo. Porque la esperanza es lo último que se pierde.
F, de Felicidad, la que tanta gente ha sentido cuando han salido vivos de la UCI, cuando han podido abrazar de nuevo, cuando habiendo estado muy cerca de la muerte, han sobrevivido.
G, de Generosidad, la que tantas personas han demostrado. Y G de gel hidroalcohólico, el que,de tanto usar, nos ha borrado ya hasta las huellas dactilares.
H, de Hospitales, que se vieron desbordados en los peores meses y que estuvieron siempre al pie del cañón. De Hartazgo, el que todos sentimos ya, el que nos inunda. De Héroes, porque los ha habido a montones.
I, de Ilusión, la que todos tenemos en que todo esto acabe, en que nuestra vida vuelva a ser lo que era. También de Idiotez, la que muchos han demostrado tener en estos tiempos.
J, de Juergas que nos han arrebatado, que no hemos podido vivir como hubiésemos querido, de Jolgorios pospuestos. También J de Jóvenes, porque no se han portado tan mal como los pintan. Porque muchos de ellos también se merecen un aplauso.
K, de los Kilos acumulados en los meses en los que no nos movimos, o de los Kilos perdidos por los que les dio por entrenar en el salón como si no hubiera un mañana.
L, de Luz, la que todos vemos o queremos ver al final del túnel.
M, de Mascarilla, el accesorio que ha irrumpido en nuestras vidas y al que no ha quedado otra que acostumbrarnos. M de Mayores, los que más lo están sufriendo, los que más echan de menos estar con los suyos porque no saben el tiempo que les quedará, porque tienen miedo. Y M, de médicos, los que han arriesgado su vida por los demás.
N, de Normalidad, la de antes, la de siempre, la de verdad, la que tanto añoramos.
O, de Oportunidad, porque las crisis también traen oportunidades, solo hay que saber verlas.
P, de Planeta, porque nunca habíamos tenido tanta conciencia de estar todos en el mismo. Porque si no lo cuidamos esto se acaba. Y también de PCR, porque nunca un palito dentro de una nariz tuvo tanto impacto en la vida de alguien.
Q, de Quietud, el estado que durante tantos meses nos embargó por completo.
R, de Rabia, la que hemos sentido tantas veces a lo largo de este año. R de Resistiré, el himno de los peores meses del confinamiento. Y de Recuerdos, porque este año nos deja tan solo recuerdos de muchas personas queridas que no pudieron vencer al bicho.
S, de Solidaridad, la de todos aquellos que se han volcado en los demás y lo han dado todo. De Sueños, los de tantas personas que han visto cómo se truncaban.
T, de Tiempo, el que parece que se nos ha escapado de las manos sin poder disfrutarlo. Y también de Teletrabajo, esa nueva manera de trabajar que nos ha traído el ccoronavirus.
U, de Unión, porque nunca había sido tan patente que la unión hace la fuerza.
V, de Vulnerabilidad, la que todos hemos descubierto. Ahora sabemos que todos somos vulnerables por muy fuertes y poderosos que nos creamos. Y por supuesto, V de Vacuna, en la que tenemos puestas todas nuestras esperanzas
W, de WC paper. El gran protagonista de los carritos de la compra durante mucho tiempo. El tesoro más deseado. El que llegó a estar en peligro de extinción.
X, paso palabra.
Y, de Ya está bien. Porque queremos que todo esto se acabe.
Z de Zoom, la nueva manera de juntarnos y vernos las caras. Otro de los grandes protagonistas del año, gracias al cual hemos descubierto papadas de las que nunca fuimos conscientes.
Adiós 2020!! Ojalá 2021 sea el año en el que no solo volvemos a ser lo que éramos sino mucho mejores. Todo es posible cuando ponemos empeño.
Feliz Navidad y Feliz 2021!!!