La semana pasada, mientras paseaba al perro por el parque, escuché la conversación de dos madres jóvenes. Comentaban orgullosas lo bien que "interactuaban" sus hijos en los columpios. Miré a los niños y me pareció que más que interactuar simplemente jugaban, como todos los niños lo han hecho toda la vida. Ingenua de mi, pensaba que la tendencia a "hablar raro" que ahora tiene mucha gente era algo exclusivo del ámbito empresarial. Pero parece que no. Parece que poco a poco está invadiendo otros ámbitos y cada vez hay más gente que habla raro. En las empresas todo es holístico, disruptivo, sistémico y sinérgico. La gente habla de plataformas, ecosistemas, resiliencia, palancas, flujos y narrativas. Y una de cada 3 palabras es un anglicismo: insights, KPIs, performance, benchmark, mindset ... La lista es interminable. Hablamos así y nadie se asombra, y aparentemente, todo el mundo sabe de lo que habla. En las empresas nos hemos vuelto muy modernos, muy absurdos o mu...
Escribo sobre la vida. Reflexiones, pensamientos, ideas que cruzan por mi mente, viajes, anécdotas, aventuras...