Cómo sobrevivir a 7 grados bajo cero!!

Esta semana ha hecho un frío terrible en Tianjin.  Varios días hemos llegado incluso a los 7 grados bajo cero! La verdad es que creo que ni siquiera en mis viajes de esquí había conocido temperaturas tan bajas….  Y sin embargo… he sobrevivido!!!

¿Cómo lo he conseguido? Me he “achinado” completamente y me he hecho con dos cosas que aquí son muy habituales para combatir el frío.

Una de ellas es esta especie de bolsita que te pones sobre la ropa y que llega incluso a alcanzar los 50 grados. Maravilloso.

Te las puedes poner donde quieras. En la parte del cuerpo que más se te enfríe…  En mi caso, me las he puesto en la espalda, en la zona de los riñones, y me ha encantado!!! Una gozada. Y encima dura muchísimo. Me las regaló mi conductora y pienso comprarme muchas más. Todo un descubrimiento.

Otra cosa muy típica son una especie de legging o leotardos supergordos y lo que es mejor… forrados por dentro como con pielecita!!! ahora bien, sólo aptos para piernas delgadas... porque te engorda cada pierna dos kilos mínimo... Además, como te quedes con ellos puestos más de cinco minutos en casa se te pueden cocer las piernas directamente.

Gracias a estas dos cosas, además de doble jersey, guantes, bufanda...,, he podido seguir haciendo una vida normal a pesar del frío. Incluso el martes me animé a irme a Pekín en tren. Salí de mi casa a las 8 y de camino a la estación, andando sobre el hielo, incluso me animé a hacer alguna foto. Estaba muy bonito.

Eso sí, mi día de compras en Pekín con mi amiga Mercedes, estupenda bilbaina que vive allí, lo compensó todo. Lo pasamos pipa!! Está claro que el frío no me va a impedirme seguir disfrutando…

Feliz semana!!

CORTE DE PELO CHINO

Antes de venirnos a China, corté el pelo a los niños, pero claro, 3  meses después, iban necesitando urgentemente un buen corte, sobre todo Gonzalo, que parecía un Beattle.

Todo el mundo me había metido mucho miedo con las peluquerías chinas, que hay miles, por cierto. Parece ser que su manera de cortar y peinar no es como la europea. 

Intenté alargar el momento lo máximo posible e incluso un día me atreví a cortarle yo misma el flequillo a Gonzalo. Qué osada. El resultado fue terrible.

La cosa urgía ya. Pregunté a alguna amiga europea pero las peluquerías que me recomendaban estaban bastante lejos de casa.

Pregunté a mi profesor de inglés y me recomendó un barbero de la calle!! Claro que él es casi calvo. A quién se le ocurre preguntarle. Así que decidí arriesgarme y probar en una peluquería cualquiera.

Mi criterio de selección fue el peinado de los propios peluqueros. En una de las peluquerías, me pareció que los peluqueros eran bastante monos e iban todos bastante bien peinados y ahí que entramos.

Los peluqueros no hablaban ni patata de inglés pero por signos logramos entendernos. Además, les enseñé unas fotos del último corte de pelo en España, que precavidamente tomé anticipando este momento.

Le lavaron el pelo con masaje incluido y le cortaron. El peluquero era un chinito muy dispuesto y amable y debo decir que finalmente le dejó bastante bien y hasta logró disimular el terrible desaguisado que le había hecho yo al pobre Gon.

Salimos muy contentos. Eso sí, el precio completamente europeo y desde luego 20 veces más caro que el barbero de la esquina…

Por cierto, lo mejor el artilugio para dejar la propina. Verdaderamente genial. Me he comprado uno igual para que mis invitados dejen sus tarjetas de visita.

FELIZ SEMANA!!!

RARO, RARO, RARO...

No hay dia que vaya al mercado que no encuentre algo que me sorprenda: una fruta, una verdura, un fruto seco.... siempre encuentro algo que me llama la atención!! Me lo paso pipa. Además, los tenderos deben alucinar conmigo, que voy siempre haciendo fotos a todo.

La última vez encontré esto.

¿Alguien puede decirme que es esto por favor?!!!!!!!!!!!!!!!! A primera vista parecen como mini murciélagos disecados…. Pero, claro, como los venden en una frutería, no creo que sea eso…  Debe ser algún tipo de fruta o vegetal, no sé… Le pregunté a mi conductora, pero sólo logré entender que era algo que se hervía y te comías y lo de dentro… ufff, no sé si me atreveré a probarlo. Claro, que nuestros deliciosos percebes tampoco es que tengan un aspecto muy bueno y mira lo riquísimos que están...

En otro de los puestos, encontré varias cosas divertidas. Lo mejor es esto.

¿Qué es esto? Parecen como peras como forma de Buda, no? Me parece realmente genial. Claro que darle un bocado al buda en cuestión quizá sea algo irreverente, pienso yo….

Esto también me llamó la atención.

Ya sé que es jengibre y que para algunos no sea algo tan raro, pero debemos reconocer que no es algo habitual en nuestra cesta de la compra y que las formas son muy divertidas. A mí me recordó a esos muñecos en los que se pinchan alfileres para hacer ritos vudús… 

¿Y  qué me decís de esto? A mi me parecen como piernas sin depilar, ja ja….

Debe ser algún tipo de tubérculo...

En fin, que me encanta ir al mercado y además ya lo pido yo todo en chino y eso me hace mucha ilusión!

Feliz semana!!

Tianjin on white

Anunciaban desde hace unos días un temperaturas bajsimas.

Y efectivamente, esta mañana nos hemos levantado con Tianjin completamente cubierto de nieve!!!

Estas son las vistas desde nuestra casa.

Algunos sitios están preciosos, como el Water Park, que es el equivalente a nuestro Parque de Retiro madrileño pero a lo chino, con barquitas incluidas.

Mirad qué foto tan bonitas.

Carlos y los niños hasta se han atrevido a hacer un muñeco de nieve.

Mi máxima preocupación es donde equiparme cual esquimal…

Feliz semana!!

En un templo budista

El lunes pasado visité el templo budista más grande Tianjin y realmente me pareció impresionante. Se llama Debei Temple.

Es un templo construido en el siglo XVII, al final de la dinastía Ming, y que, tras sufrir varias “vicisitudes” ha sido casi reconstruido hace unos años. Lo cierto es que está fenomenal conservado y es muy bonito. Me encantó la visita.

El templo tenía unas estatuas de Buda espectaculares. Se enfadaron conmigo porque hice fotos por cierto… pero, disimuladamente, las seguí haciendo….

Este “señor” no sé muy bien quién será pero me pareció genial.

El templo también está lleno de unos buditas pequeños monísimos.

A la salida del templo, encontramos este mercado genial, donde venden cosas tipo incienso, velas, estatuas religiosas... Me encantó!! Me contuve para no comprar nada. A Carlos le da un ataque si planto un buda en el salón. Lógico por otra parte…

Me llamó también la atención algunos puestecillos a la salida del templo donde puedes comprar cosas para ofrecer en los altares. La mayoría de la gente ofrece frutas y flores… artificiales! A los chinos les encantan las flores artificiales.

Después de visitar este templo, pensé que realmente sabía muy poco del budismo y me puse a “investigar” un poco.

Es curioso pero el budismo, más que una religión, es una filosofía o forma de vida. De hecho, Buda no fue un Dios, ni hijo de ningún Dios, sino que nació príncipe, el famoso príncipe Shiddarta.

Shiddarta nació en Nepal hace más de 2.500 años y tras vivir unos primeros años en un mundo de placer y despreocupación, descubrió que el mundo que le rodeaba era completamente distinto y que existía la pobreza, la vejez y la muerte. A partir de ahí su vida cambia. 

Después de un período de mortificación física como asceta llegó a la conclusión de que eso no era lo que buscaba. Decidió entonces meditar para resolver sus dudas. En sus meditaciones tuvo que superar muchas tentaciones pero al final consiguió llegar a la iluminación, a un estado de paz interior, que es el famoso Nirvana.

Durante el resto de su vida viajó por India para extender su enseñanza del sendero hacia la Iluminación.

Uno de los pocos dogmas que tiene el budismo es la teoría del renacimiento, según la cual cada ser renace después de morir debido a su propia fuerza kármica. Todos los seres siguen renaciendo hasta que llegan al momento de iluminación o despertar, es decir hasta que son un buda.

Según el budismo todas lo que hacemos nos condicionan y esto es lo que se llama karma.

No me enrollo mucho más, pero me parece muy interesante, sobre todo teniendo en cuenta que el budismo es una de las principales religiones en China.

Descalzos (aunque te huelan los pies)

Como pasa en bastantes países, en China existe la costumbre de descalzarse antes de entrar en casa. Y lo hace todo el mundo.

En mi casa, por ejemplo, la  ayi ( asistenta) se descalza cuando llega. Menos mal que se pone una especie de zapatillas de estar en casa…  

Se descalza también mi profesor de inglés, que a pesar de ser americano, está ya muy “achinado”. Y la verdad es que una sensación rara que me esté dando la clase descalzo…  ¿y si le huelen los pies? ¿ y si tiene un tomate?  Puede resultar un poco apuro….

Pero es que se descalza hasta el fontanero o el electricista que vienen a arreglarte algo. En estos casos, se suelen poner una especie de pantuflas tipo lo que se ponen los médicos para entrar en los quirófanos.

Realmente, la mayoría delas veces agradezco la costumbre porque mi casa tiene una tarima oscura, preciosa pero muy poco sufrida y a la mínima se marcan todas las pisadas, así que casi mejor si se descalzan…

Y claro, los descansillos de las casas están muy habilitados para que dejes los zapatos fuera, como puede verse en la foto.

También es muy frecuente, por cierto, decorar las puertas de las casas.

Y hablando de descansillos, en ellos puedes encontrar hasta motos!!! Auténticas motos. Entiendo que subas una bicicleta pero… ¿una moto? Me parece tremendo. Aparte de estar sucísimas  las motos pesan un montón y me pregunto si los ascensores están preparados para aguantar semejante peso.

En mi casa los ascensores aguantan 1.800 kilos pero no creo que todos sean tan capaces. De hecho, es China son bastantes frecuentes los accidentes en ascensores. No me extraña. Y os preguntaréis, ¿la gente sale del ascensor directamente subida en la moto? ¿ va en moto por el portal? Pues muchos sí. Increíble. Puedes ser atropellado en tu propio portal. Tal cual.

Feliz fin de semana!!

Fin de semana en Shanghai

Este fin de semana hemos estado en Shanghai. Me ha encantado la ciudad. Verdaderamente espectacular!!! Lo hemos pasado genial y nos ha cundido muchísimo.

Es una ciudad enorme, más de 23 millones de personas, moderna y cosmopolita.  

La parte más conocida de Shanghai es lo que se conoce como el “Bund”, que es el paseo a orillas del río. 

Es una zona preciosa. Es la parte donde están todos los edificios antiguos de la época colonial. Son edificios maravillosos que puedes visitar por dentro. Además, en muchos de ellos hay restaurantes muy modernos y “fashion” como en el que cenamos el sábado, por ejemplo, el UNICO, un sitio ideal que nos recomendaron, muy glamuroso y sofisticado, y donde nos presentamos tan contentos con los tres niños, que debo decir que se portaron bastante bien. Eso si, bastante carito el sitio y para ser China, más aún. 

Otro día cenamos en otro restaurante que también nos gustó mucho y que es bastante conocido, el Lost Heaven, esta vez, comida china superrica. Muy recomendable.

Pasear por el Bund sin duda es toda una experiencia, tanto de día, como de noche. Los edificios coloniales están muy bonitos iluminados pero además desde el Bund tienes enfrente, al otro lado del río, todos los famosos rascacielos de Shangai y de noche es todo un espectáculo.

En este caso, la famosa Pearl’s TV Tower, la torre más emblemática de la ciudad, estaba iluminada con los colores de la bandera francesa como recuerdo a los fallecidos en los atentados terroristas de París. Por cierto, nos entrevistó la TV china! Fue de traca… Los 5 ( incluido Juan) dimos nuestra opinión, en inglés claro, sobre los atentados. Lo que ya no sé es si finalmente aparecimos o no en la tele...

Del Bund sale una de las calles más importantes de la ciudad, Nanjing Road, una calle larguísima, que, sin duda, merece la pena recorrer. 

La calle está dividida en dos partes. La primera va desde el Bund hasta la famosa People’s Square,  con un tramo peatonal muy animado y edificios muy bonitos. El resto de la calle, desde la plaza hasta el final es una zona super chic, con miles de tiendas, la mayoría de lujo. Esta segunda zona estaba toda iluminada como de Navidad, no sé si por las fechas o porque está así siempre… Muy bonito en cualquier caso.

Otra zona muy interesante es  la “Old City”, que es digamos la zona más china. Aquí está, entre otras cosas, el famoso jardín Yuyuan, que aunque es bastante turístico no deja de ser muy bonito. 

Al lado hay un mercadillo con cosas típicas, una casa de té y restaurantes donde puedes probar una especie de “sopa de dumpling” que no había visto hasta ahora en otros sitios y que no probé.

También merece mucho la pena visitar lo que llaman la “French Concession”, es decir, el barrio francés, una zona en la que parece realmente que estás en alguna capital europea, aunque con toques chinos. 

Lo que más me gustó, en la French Concession, fue un barrio que se llama Xiantandi, lleno de casas de principio de siglo que han restaurado y convertido en tiendas y restaurantes. Son callecitas con mucho encanto y había un ambientazo. 

Y por supuesto, también hay que cruzar al otro lado del río, al llamado Pudong, que como decía, es la zona de los grandes rascacielos, a muchos de los cuales se puede subir para disfrutar de las vistas. 

Aquí es donde está la famosa Torre de Shangai, el Shanghai World Financial Center, que es uno de los rascacielos más altos del mundo. 

En el edificio también hay muchos restaurantes y de hecho, comimos en uno de ellos con un compañero chino de Carlos y su familia. Muy auténtico todo.

En definitiva, que nos ha encantado Shanghai!!! Un destino muy recomendable, para visitar pero también para vivir. espero volver. Por cierto, el Banco Santander tiene sede allí… 

Feliz semana!!!